miércoles, 24 de marzo de 2010

Inconscientes



-He perdido una pierna.
-Te has torcido el tobillo.
-No, he perdido una pierna.
-A ver, intenta moverla.
-¡No puedo! ¡Tengo una parálisis histérica!
-La histéria no paraliza los músculos.
-Yo sé cuando estoy paralizada y cuando estoy histérica. Y ahora estoy paralizada y estoy histérica!


Inconscientes dirigida por Joaquín Oristrell.

Barcelona, 1913.
Alma es quizá una de las mujeres más modernas de su tiempo. Su padre, el Dr. Mira, es el neurocirujano más prestigioso del país. Su marido, el Dr. León Pardo, ejerce también la medicina como psiquiatra. Ese verano ha visitado Viena, donde se ha puesto al servicio del revolucionario Dr. Sigmund Freud y sus escandalosísimas y avanzadísimas teorías sobre la histeria y la sexualidad.
Todo empieza la tarde en que Alma llega a casa y encuentra a su marido con los ojos llenos de lágrimas, dispuesto a desaparecer de su vida y de la de los demás. Sin dar más explicaciones que unos balbuceos incomprensibles, León huye, dejando a Alma sola y a punto de dar a luz.
Salvador es el cuñado de Alma, también psiquiatra. Pese a estar casado con la hermana de la protagonista, Salvador, un hombre mucho más conservador que León, está profundamente enamorado de ella. De ahí que, cuando Alma le pide que la ayude a encontrar a su marido desaparecido, él no pueda negarse, pese a que su lógica le indique que se va a meter en un lío terrible.
La única pista a seguir es un manuscrito sobre la histeria y la sexualidad femenina basado en cuatro pacientes:
Una actriz con manía persecutoria, una psicótica que intentó asesinar a su marido, una mujer con grave crisis de identidad sexual... y una desconocida que ha descubierto en su pasado un terrible secreto.
Siguiendo esos indicios, Alma y Salvador inician una aventura a lo Sherlock Holmes, donde la hipnosis, el amor, el peligro y todos los tabúes imaginables se entrecruzan.


Y ahí está la sinopsis y tráiler de la peli. La verdad es que es graciosa, me he reído mucho. Y encima sale Leonor Watling, ¿qué más se puede pedir?


[†] HaRu [†]

sábado, 28 de noviembre de 2009

Ella te quiere como amigo. Un clásico.

Hasta ahora pensaba que la peor frase que te puede decir una tía es: "Tenemos que hablar...". Pero no, la peor frase que te pueden decir es: "yo también te quiero... pero solo como amigo".

Eso significa que para ella tú eres el mas simpático del mundo, el que mejor la escucha, el más enrollado... pero que no va a salir contigo. Va a salir con un impresentable que sólo quiere acostarse con ella. Eso sí, cuando el otro le haga una putada, te llamará a ti para pedirte consejo. Es como si vas a buscar trabajo y te dicen: "Señor, es usted la persona idónea para el puesto, el que mejor currículum vitae tiene, el más preparado... pero no le vamos a contratar. Vamos a coger a un incompetente. Eso sí, cuando la cague, ¿le podríamos llamar a usted para que nos saque del lío?"

Me pregunto, ¿qué he hecho mal? Hemos ido al cine, nos hemos reído, hemos pasado horas tomando café... ¿A partir de qué café nos hicimos amigos? ¿Del quinto? ¿Del sexto? Joder, eso se avisa. ¡uno menos, y ahora me estaría acostando con ella!

Para ellas un amigo se rige por las mismas normas que un Tampax: puedes ir a la piscina con él, montar a caballo, bailar... Lo único que no puedes hacer con él es tener relaciones sexuales.

Es que si lo piensas... Si para una tía considerarte "su amigo" consiste en arruinar tu vida sexual, ¿qué hará con sus enemigos? A mi me parece muy bien que seamos amigos, lo que no entiendo es por qué no podemos "follar como amigos".

Yo creo que la amistad entre hombre y mujeres no existe, porque si existiera, se sabría. Lo que ocurre es que cuando ella te dice que te quiere sólo como amigo, para ella significa eso y punto. Pero para ti no. Para ti significa que si una noche estáis en la playa, ella se emborracha, hay luna llena, se han alineado los planetas y unos meteoritos amenazan la Tierra... ¡A lo mejor consigues enrollarte con ella!

Por eso tragas, porque nunca pierdes la esperanza. ¿Qué se lía con Oscar? Pues ya romperá... cuando lo hace, tú atacas con la técnica de "consolador": "No llores, el Oscar ese es un chulo. Tú te mereces algo mejor, un tío que te comprenda, un tío que sepa estar ahí cuando lo necesitas... Que sea bajito, que sea castaño, que no sea muy guapo, que se llame Javier... como yo".

Al menos, siendo amigo puedes meter cizaña para eliminar competencia. Es la técnica del "gusano miserable". Cuando ella te dice:
- Ay, que majo es Paco, ¿verdad?
- ¿Paco? Es muy majo, sí... un poco bizco.
- No es bizco, lo que pasa es que tiene una mirada muy tierna.
- Sí, en eso tienes razón, me fijé el otro día, cuando miraba a Marta.
- No la miraba a ella, me miraba a mí.
- ¿Ves como es bizco?

El colmo es que las tías consideran que tienen una relación "superespecial" con un tío cuando pueden dormir con él en la misma cama y que no pase nada. Pero bueno, ¿lo "superespecial" no sería que sí pasara algo?

Un día después de una fiesta, te quedas ayudándola a recoger, como haces siempre, y cuando acabáis, ella dice:
- Huy, es muy tarde, ¿por qué no te quedas a dormir?
- ¿Y donde duermo?
- Pues en mi cama.

A ti te tiemblan las piernas: "¡Ésta es mi noche, se han alineado los planetas!" Al rato te das cuenta de que no son precisamente los planetas los que se han alineado, porque ella, como sois amigos, con toda la confianza, se queda en camiseta y bragas, y tú, visto lo visto piensas: "Me voy a tener que quedar en calzoncillos... con la alineación de planetas que llevo encima".

Así es que te metes en la cama de un brinco y doblas las rodillas para disimular. Ella se mete, te pega el culo y te dice: "Hasta mañana". ¡Y se duerme! "Pero bueno, ¿cómo se ha podido dormir tan pronto? ¿Pero esta tía no reza ni nada?".

¡Estas acostado con la tía que te gusta! Al principio no te atreves a moverte, para no tocar nada. Sabes que si en ese momento hicieran un concurso, nadie podría ganarte: eres el tío mas caliente del mundo. ¡Y que larga se te hace la noche! Te vienen a la cabeza un montón de preguntas: "¿Tocar una teta con el hombro será de mal amigo? ¿Y si es la teta la que me toca a mí?". Pero después de muchas horas ya solo te haces una pregunta: "¿Seré realmente gilipollas?".

No puedes creer que estéis en la misma cama y no vaya a pasar nada. Confías en que en cualquier momento se dé la vuelta y te diga: "Venga tonto, que ya has sufrido bastante, ¡hazme tuya!". Pero no. A las tías nunca les parece que hayas sufrido bastante. Y mira que sufres... Porque tienes toda la sangre del cuerpo acumulada en el mismo sitio. Se han dado casos de hombres que han llegado a reventar.

Pero ahí no termina tu humillación. A las siete de la mañana suena el timbre de la puerta:
- ¡Ay, es Oscar!
- ¿Oscar? ¿Pero no le habías dejado?
- Ya te contaré, que ahora tengo prisa. Se me olvidó decirte que iba a traer su perro, porque como nos vamos a Vaqueira, yo le dije que el perro mejor que contigo no iba a estar con nadie. ¡Qué tu eres un amigo! Tienes mala cara, ¿has dormido bien?

Y ahí te quedas con el perro, que ése sí que es el mejor amigo del hombre.


Me encanta este monólogo.


[†] HaRu [†]

lunes, 21 de septiembre de 2009

¿Alguna vez habéis sentido miedo?

No hablo del miedo de las películas de miedo, que eso ni es miedo ni es nada. Hablo del auténtico miedo, ese miedo viscoso como el pegamento que te paraliza, te agarrota la mandíbula y no te permite respirar; que te deja indefenso y perdido.

No hablo del miedo a los fantasmas, a los vampiros o a los monstruos babosos. Claro que no. Hablo del miedo verdadero.

Puede que creáis haberlo percibido en alguna ocasión. Tal vez en aquella noche espesa y crujiente, leyendo un buen libro de Poe o Lovecraft sobre la lápida de una tumba solitaria a los pies del mayor ciprés del cementerio, a la luz de unas velas y de la luna llena. ¿Lo recordáis? ¿Es eso? ¿Ahí pensáis que está el miedo? Olvidadlo.

El miedo propio no lo puede inventar otro, sino que siempre está dentro de uno mismo. Ahora lo sé. El horror se esconde en los rincones de nuestra mente, está fabricado con el material de lo desconocido y no se parece a nada de lo que hayáis podido imaginar.


[†] HaRu [†]

viernes, 21 de agosto de 2009

Hola =D

Hola, me presento:

Soy Haru, tengo 18 años y soy de Valencia. Me gusta leer, escribir, ver pelis, salir con los amigos... No sé, lo típico de una persona como yo hace a los 18 años xD
LLevaba tiempo pensándolo, y por fin he decidido hacerme un blog. Lo malo es que al no disponer de internet en mi cuarto, actualizaré cada mucho T_T Pero intentaré que sea un poco seguido ^^

Pues eso, que no tengo nada más que contar, si alguien quier algo, que pregunte.


A ser felices,

[†] HaRu [†]